5 de septiembre de 2010

5 de septiembre de 2010: los novios de nuestras hijas


Cuando tu hija llega a la adolescencia y aparece la figura del "amigo", "compañero" o "novio" uno se da cuenta, rápidamente, que la ley de la entropía se cumple irremisiblemente. El segundo novio hace mejor al primero, el tercero al segundo, el cuarto al tercero y así sucesivamente. La cadena de acompañantes que merodean por la vida de tu hija y, lejanamente, por la tuya, sigue una espiral descendente. Al final, uno no recuerda los nombres de casi ninguno pero sí la impresión de que los primeros, o el primero, eran una delicia comparado con el que finalmente se sienta, un día, a comer en nuestra mesa y se bebe aquel vino californiano que teníamos guardado para una ocasión especial que nunca pensamos sería ésta.